Vivir con tu ejemplo

Bebiendo de las fuentes de tu vida,
de tu luz y tu sabiduría, de tus ansias y alegría,
reteniéndote en el despertar de tus sueños nocturnos
cuando te alcanzan los rayos diurnos.

Como una princesa al despuntar el alba,
recibes el nuevo día con tus manos alargadas
recogiendo el calor temprano en la alcoba
acariciando tu piel como sábanas aterciopeladas,

Como guardián de tus velos y desvelos,
como paladín defendiendo a su dama,
logrando el amor que cualquiera soñara
en mi juventud otrora añorara.

Como rosa perfumada, impregnas todo lo que tocas,
se respiran olores a primavera temprana,
tu sonrisa aparca las desgracias ajenas,
tu palabra cura la enfermedad cercana.

Enamoras con tu forma de ser y sentir,
te seguiría al fin del mundo con tu vivir,
rebajas a los necios con tu sabiduría,
enalteces a los justos con tu ejemplo de cada día.