lunes, 26 de octubre de 2009

Tu inocencia se adueño de mi corazón



Como la golondrina deja su nido
en el final del estío,
así dejaste tu morada segura
para venirte conmigo,
descubriendo otras visiones
más amplías,
un horizonte por ti desconocido,
una aventura nueva
en la gran selva de la vida.

Como un colibrí asustadizo
revoloteando de aquí para allá,
de flor en flor,
saboreando con esos ojos
todo un mundo de misterio y color,
con tu inocencia inmaculada,
con tu bondad innata.

Corriendo cono Gacela
cogida de mi mano,
todo lo querías ver,
tocar y oler,

¡que espectáculo tan maravilloso!.

Verte tan feliz y dichosa,
como el despertar de una mariposa
en el amanecer de una nueva vida,
transmutando tu crisálida
por alas de libertad,
siempre corriendo.....
de aquí para allá...
de allá para aquí.

Poco a poco nuestro amor fue creciendo
expandiéndose como las galaxias,
subiéndonos el fuego serpentino
de nuestros adentros,
apoderándose la pasión de nosotros
y nos dejamos llevar........
por sus besos,
sus caricias,
uniendo nuestras pieles,
en un éxtasis invocando
lo más sensual y primitivo,
siendo a la vez...
lo más hermoso vivido.

Con tu inocencia te adueñaste
de mi corazón,
con tu pasión.....
hiciste que perdiera para mi fortuna,
por un largo tiempo...
la razón.

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