Una sinfonía de amor dedicada

Una sinfonía de amor te dedico
imperecedera por la eternidad de los siglos,
con el mejor papiro de Egipto plasmada,
para que perdure en el espacio y el tiempo.

Es tanto lo que he recibido de tu amor,
que se llenarían pozos transmutados en oro,
es tanto los besos que me guardo,
que llenaría mi boca de tus olores a nardo.

Melodías nacen de lo profundo del corazón,
torbellinos de notas para viento y cuerdas,
explosión de sonidos que al aire revientan
como fuegos fatuos en noche de estrellas.

Mi imaginación ya no conoce fronteras,
mis composiciones son certeras flechas
rompedoras en tu aura interna, explosionando,
sin que tengas fuerza para detenerlas.

No las detengas, déjalas postreras,
como la sinfonía que te dedico,
que la eternidad nos recuerde
como nos amamos apasionadamente.

Las estrellas y al negro vacío pongo por testigos,
explosionando mi alma en destellos lumínicos,
que más allá de la muerte seguiremos juntos
aunque diez encarnaciones nos separen.

Sólo será por un segundo.........
en la inmensidad del espacio-tiempo.