No puedo asimilar... y lo intento,
un mundo donde todo gira al revés
donde caminamos con la cabeza
y pensamos con los pies.
Un mundo plano sin dimensiones,
ya que los sentimientos y pensamientos
siguen lineas horizontales...
Como un corazón sin latidos
con un diagrama plano,
sin función,
inerte.
Un mundo donde se pisotea lo más elemental del ser humano...
su humanidad misma,
donde la insensatez gana la partida al razonamiento más elemental,
sin leyes justas, sin justas leyes,
echando por tierra la evolución natural de las especies
¿pero, todavía quedan especies sin machacar hasta su total extinción?.
No puedo asimilar y no asimilo
la pobreza mundana de este planeta,
sí, su pobreza de espíritu,
ya que estamos poco evolucionados espiritualmente,
mucho materialmente (algunos)
y viviendo muy precariamente... los más.
Me cuesta asimilar tanta falta de materia gris
en una cavidad cerebral de homo sapiens,
más bien de homo burrus,
tropezando con las mismas sandeces una y otra vez,
con los mismos dilemas para elegir un camino evolutivo...
más humano,
más universal y cósmico,
de miradas lejanas
de horizontes de futuro
con indisolubles lazos fraternos...
Solo el ser, como esencia manifiesta del Logos.
Te quiero siempre, pero cuando te leo así, tan especial como eres, te quiero mucho más. Gracias Sergio. Estas letras son todo un regalo, un hermoso regalo.
ResponderEliminarPues sí...así somos los seres humanos a veces,
ResponderEliminarcon sus cosas buenas y malas,
pero a veces llega a ser tan difícil comprender el porqué de esto o de lo otro,
de esos caminos sin finales, tropezando con la misma piedra...
pero ahí están esas sandeces...nos gusten o no; están ahí.
Y nos costará asimilarlo, una y otra vez, pero esperemos que algún día lo logremos.
Un placer volver a leerte y mucha alegría de saber de ti.
Te envio abrazos desde mi distancia, cuídate mucho.