M ujer de rosas, perfumadas con el ozono de su mar.
C iñendo a su antojo los versos de amor
A rremete con su corazón al alma de este poeta,
R emero infatigable por el candor de sus melodías
M irando en añoranza el océano de sus desdichas.
E nsimismado quedo cada noche en mis ensueños,
N oches en vela, nocturnos sin besos........
soledades eternas.
C iñendo a su antojo los versos de amor
A rremete con su corazón al alma de este poeta,
R emero infatigable por el candor de sus melodías
M irando en añoranza el océano de sus desdichas.
E nsimismado quedo cada noche en mis ensueños,
N oches en vela, nocturnos sin besos........
soledades eternas.
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