Dedicado a Jess y Andrea

No hace mucho tiempo
y gracias a este lugar,
encuentro de sentimientos,
de musas e inspiraciones,
escritores y poetas.

No hace tiempo dos almas gemelas,
dos medias naranjas
o dos granitos de café,
su amistad me ofrecieron,
creando una hermandad,
porque así les llamo,
hermano y hermana
con todo el cariño y humildad.

En la tierra de la eterna primavera,
dónde el Sol siempre luce,
en tierra de gentes sencillas
el amor une parejas benditas.

Y sus frutos cosechan,
al igual que en Belén de Judea
nació un niñito fruto del amor,
en Medellin nacerá un chiquitín
semilla de dos buenas almas,
Jess y Andrea.

Y sonarán las trompetas,
y tintinearán las campanas,
bailando las auroras engalandas
con asteroides y cometas.

Se lanzarán Loas a los vientos,
pues un nuevo ser nacerá,
deteniendo el tiempo
en un instante eterno,
y de lo alto se oirá en sonoro trueno;

Una alma bendita ha venido a la Tierra,
del amor y la fusión de dos seres,
hijo de Jess y Andrea.

¡Que así se cumpla!

¡Que así sea!