Condena

Te condenamos a la oscuridad de la conciencia
hasta que aprendas el valor de la inocencia,
vagarás sin rumbo, sin brújula,
darás palos de ciego,
pedirás clemencia para sortear peligros,
y tus razonamientos quedarán obnubilados.

Una encarnación más que sufrirás,
un karma menos para reparar,
sufriendo la soledad del recién nacido,
te sentirás voluble,
como malherido,
sólo en un mundo lleno,
vacío, triste y abandonado.

Quizás tengas suerte y nazcas en familia noble,
o en la miseria, comiendo basura y mendigando.


Será el rechinar de dientes,
tus huesos sentirán el glacial frío,
tu cerebro se paralizará por inactividad,
el pánico se te apodera
como un poseso viviente,
y pedirás perdón al vacío estelar,
a la negra y espesa oscuridad.

Nadie te responderá,
como tu no auxiliaste
a quien te lo pedía,
la nada espiritual será tu compañera,
el vacío existencial tu insignia.


¿volverás a esclavizar o a ser esclavo?,
¿volverás a pisotear o permitirás que te pisoteen?.


Si eliges la oscuridad, eso tendrás,
como consorte fiel que no te abandonará,
volverán a salirte los enemigos de antaño,
reclamando tu sangre, incluso tu vida.


Serás un zombi en manos oscuras,
una marioneta de cartón e hilos,
carnaza para Cancerbero
y un hijo más para el averno mental.


Tu decides ahora,
¿cambiarás tu vida
o volverás a se presa de tus demonios?.


Tu decides,
pero hazlo pronto,
el próximo infierno te aguarda.